Décima Región insta a adoptar una vida saludable

Mala alimentación, sedentarismo y los vicios, son factores que contribuyen a incrementar esta posibilidad de riesgo y producir un impacto desfavorable sobre la salud.

La hipertensión arterial: no sólo puede causar daño al corazón, sino a otros órganos. A medida que se avanza en edad, las arterias se endurecen, por lo que van perdiendo elasticidad. Con el incremento de presión arterial (hipertensión), este proceso tiende a acelerarse produciendo severos daños, tanto al corazón, riñón, páncreas, cerebro y retina. El valor normal de presión sanguínea es de 120/80. Con dieta saludable se consigue controlar la presión arterial.

Alcoholismo y drogas: pueden producir daño cerebral e incluso la muerte. Establecen dependencia orgánica y emocional.

Dislipidemia: es el aumento de los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, esto puede producir aterosclerosis y pancreatitis hemorrágica aguda. Los niveles ideales de colesterol y triglicéridos deben ser, menor a 200 ml y 150 mil, respectivamente. La dislipidemia se controla con dieta, caminata y en algunos casos se suministra medicación.

Sedentarismo: se denomina a la nula actividad. Se recomienda la práctica de ejercicios por lo menos media hora, tres veces a la semana. La falta de actividad física puede provocar, obesidad, hipertensión arterial y diabetes.

Cintura prominente: constituye un factor de riesgo cardiovascular. Expertos aducen que el control perimétrico es importante para impedir problemas de índole cardiaco. Las mujeres pueden medir hasta 80 cm, mientras que los varones 94 cm.; pasando estos niveles se considera que la persona se halla en riesgo cardiovascular.

Prevención

Para prevenir acontecimientos cardiovasculares es fundamental adoptar un estilo de vida saludable, que contemple:

•    Alimentación sana que incluya frutas, verduras, y fibras, este último ayuda a disminuir el colesterol en la sangre y previene el cáncer de colon.

•    Reducir el consumo de sal, pues incrementa la presión arterial y afecta al corazón.

•    Moderación con el azúcar. En gran cantidad produce obesidad, aumenta el riesgo cardiovascular y empeora la salud de los diabéticos.

•    Realizar actividad física moderada periódicamente, siempre bajo orientación médica. Mantener un peso adecuado es importante para la salud.