Investigador relata historia de obrajes y yerbales de Alto Paraná
Barcilio Leguisamon en su libro “Antecedentes remotos, mediatos e inmediatos de Puerto Presidente Franco”, comenta la historia de esta puja...
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Barcilio Leguisamon en su libro “Antecedentes remotos,
mediatos e inmediatos de Puerto Presidente Franco”, comenta la historia de esta
pujante comunidad. Los relatos se remontan a 1885, tiempo en el que se creo la
empresa Industrial Paraguaya, con 500 leguas cuadradas de tierras, de montes y
praderas vírgenes para la explotación de las maderas preciosas y los inmensos
yerbales naturales.
Lequisamon recuerda que la casa central se hallaba en
Asunción, en las cercanías del puerto y el asiento operacional del trabajo en
el distrito de Itakyry, Alto Paraná. Menciona que allí aparece Alika, el más grande y negro personaje de la empresa
que organizó el sistema despiadado y esclavizante, conocido con el nombre de el
Mensu, que significa mensualero. Su
nombre completo es Julio Toribio Alika.
La empresa estaba concesionada a Adela Frederking viuda de
Bullerí, Varonesa de Londres, con capital inglés, esta mujer tuvo un amigo
empresario en España y le indujo a que hiciera inversión en Paraguay, comprando
extensa tierra barata con fines de explotar las maderas y la yerba mate, se
llama Manuel Ordóñez, así lo hizo, con capital español. Este empresario, al margen de sus actividades
obrajeras tenía su propio viñedo y fabricaba su propio vino en Alto Paraná,
comenta en su introducción Leguisamon.
Añade: “Hacia 1971 y 1974, bajábamos en lancha, con unos
amigo a Puerto Ordoñez, lugar preferido para nuestra caza y pesca, entonces se
podrá apreciar rastros de extenso viñedo en decadencia total, encontrábamos
algunos sunchos de metal de grandes pipones totalmente podridas. A dos kilómetro
del puerto, en la cabecera de un bañado se encontraba una tapera de grandes
carrerias, en las adyacencias del puerto se hallaba un cementerio del obraje y
dos pozos cargados de rollos y en la cercanía una cruz de hierro torcido en cuyo pecho lleva
la leyenda: Aquí descansan los restos
del Juan B. Velazquez, que según las versiones era el mayordomo de la empresa,
que fue asesinado en el mismo lugar, como era costumbre en aquellas tiempos”.
Según Leguisamon Ordóñez tenía un empresario en Francia
igualmente le hizo la liga para invertir en la compra de extensa tierra en
Paraguay, al paso de ayudar a Lázaro de America. “Así también lo hizo entusiasmado José
Barthe, sumerio José Domingo Barthe y Obdulio Barthe, este último muy
renombrado en el Paraguay, por ser hombre de barricada, que tomó prisionera a
la ciudad de Encarnación con 80 hombres,
luego se batió en retirada agua arriba del río Paraná y se y se produjo su desbande
en la boca del Río Yguazú en las Tres Fronteras, es comunista internacional,
con lo que se incorporaron el capital francés en el Alto Paraná”.
Agrega: “Por ultimo, apareció el capital suizo con la
presencia del Clan Moisés Santiago Bertoni, que a invitación del General
Bernardino Caballero, se había instalado en Puerto Península con 10 mil hectáreas
de tierras, cuyas investigaciones científicas han aportado cuantiosos
beneficios a la Sociedad Paraguaya, hasta nuestros días”.
“Estos son los primeros cuatros inversores que llegaron al
Alto Paraná, después de la guerra grande que culminó en 1870. La Industrial Paraguaya, con capital inglés;
Manuel Ordóñez, capital español; José Barthe y sucesorios con capital francés y
por ultimo el Clan del sabio Bertoni, con capital suizo. Son los cuatro quienes
dieron el nombre de Alto Paraná, cada cual son sus respectivos estilos de
organización, en medio de la precariedad de las vías de comunicación de Asunción
a Encarnación, vía férrea y de ahí por vía fluvial remontando el río Paraná
hasta el Puerto Adela”.
“Como no había colonias agrícolas en producción, cada Administración o Mayordomía, tenían que
proveerse a través de los buques macateros, que subían desde la ciudad de
Encarnación a Puerto Adela. Eran varias embarcaciones pioneras que se dedicaban
al negocio. Hubo un tiempo en que ningún buque-macatero, quería subir más
Puerto Adela, por temor a la fama de violenta que caracterizaba a la organización
Alika, por temor a la fama violenta que caracterizaba a la organización de
Alika”.
El libro se puede conseguir en librerías de la ciudad de
Presidente Franco.