Pobladores de Ñacunday claman por la construcción de un puente

Vecinos de la zona sur de Alto Paraná que se encuentran aislados, desde que la Prefectura Naval decidió amarrar la balsa que operaba hace 15 años sin habilitación sobre el río Ñacunday, claman por la construcción de un puente. Ayer un grupo de 100 personas se manifestaron y el próximo miércoles harán lo mismo ante la Junta Municipal en Puerto Paranambu.

La situación es muy difícil. Afirman debido a que el distrito de Ñacunday está dividido en dos por el río y sin la balsa en funcionamiento, están totalmente aislados. El paso se realiza en precarias canoas, mientras los vehículos deben ir unos 70 kilómetros para tomar la ruta VI y cruzar hacia el otro lado del distrito.

La Prefectura Naval había dispuesto el amarre de la balsa luego de confirmar que no contaba con una habilitación, pese a estar operando hace más de 15 años.  La decisión fue adoptada luego de que toda una familia pereciera al caer de las balsas en las aguas del Ñacunday.

José Martínez, uno de los pobladores del lugar, señaló que la situación es muy difícil debido a que es imperiosa la necesidad de contar con un puente y mientras tanto recuperar la balsa para permitir el pasado de vehículos y personas. “Es por todo conocido que nuestro distrito está dividido en dos por el río Ñacunday, por lo que es vital mantener este canal de comunicación, de lo contrario nos encontramos aislados”.

El poblador pidió a las autoridades municipales, departamentales y nacionales no olvidarse de Ñacunday, que pese a ser un distrito gran productor de soja, alberga comunidades paraguayas muy pobres y que necesitan de la atención del gobierno.