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Ministro del Ambiente, Oscar Rivas. |
(NUEVA YORK, Especial) El proceso de degradación de suelo
que sufre el Paraguay amenaza con reducir el gran potencial de productividad de
alimentos y de agua dulce de este país, señaló este martes el ministro del
Ambiente, Oscar Rivas, durante su intervención en la Reunión de Alto Nivel
sobre Desertificación en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas, en
Nueva York.
Los inminentes procesos de desertificación en territorios
del Paraguay, apuntó Rivas, serán el resultado de las persistentes prácticas de
conversión de tierras, prácticas culturales y sistemas de producción que
generan erosión y compactación de suelos y conducen a procesos de reducción de
fertilidad y productividad.
Más de 100 Jefes de Estado y de Gobierno, o Jefes de Delegación,
participaron en esta reunión, cuyo tema central fue el establecimiento de una
agenda prioritaria para la implementación de las metas de la coinvencion de
lucha contra la desertificación y la sequía, asimismo la instalación de un
panel científico internacional que fomente mayores conexiones entre la
comunidad científica y la Convención de Naciones Unidas de Lucha contra la
Desertificación y la Sequía (UNCCD, por sus siglas en inglés), un acuerdo
internacional en 1992 y ratificado por el gobierno paraguayo en 1997.
Paraguay estuvo representado por una comitiva de la
Secretaría del Ambiente (SEAM), encabezada por su titular, y el Ministerio de
Relaciones Exteriores.
El ministro del Ambiente expuso sobre las iniciativas
emprendidas por el gobierno nacional para combatir el fenómeno de la
desertificación, que según las Naciones Unidas, afecta a unas 2.000 millones de
personas en el mundo.
Entre esas iniciativas se encuentra el Programa de Acción
Subregional para el Desarrollo Sustentable del Gran Chaco Americano, que
involucra a Argentina, Bolivia y Paraguay, y que cuenta con un financiamiento
del Fondo Global para el Medio Ambiente (GEF, por sus siglas en inglés) de
8.000.000 de dólares. En el Paraguay será implementado a través de la SEAM con
un fondo de 1.500.000 dólares. Los tres
ejes del proyecto se centran en la lucha contra la desertificación, cambio
climático y conservación de la biodiversidad.
Otro proyecto trinacional es el denominado “Apoyo a la
profundización del proceso de integración económica y desarrollo sostenible del
Mercosur”, que constituye la mayor cooperación de la Unión Europea en la
región, con una financiación de 18 millones de euros.
Rivas hizo mención asimismo a la resolución de la SEAM por
la cual se amplía la superficie de la Reserva de la Biosfera del Gran Chaco
Paraguayo, creada por decreto nº 13.202 en junio de 2011, a una superficie
total de unas 8 millones de hectáreas.
Otro punto importante incluido en su discurso fue la
decisión de la SEAM de establecer el legado de iniciativas del desarrollo
verde, que aseguren la sustentabilidad del desarrollo y la inclusión social.
La cuestión de la desertificación concierne la desaparición
de tierras donde las poblaciones tenían la capacidad de plantar o criar ganado,
y que se han convertido en zonas áridas en las que viven unas 2.300 millones de
personas en casi 100 países, según la ONU.
Gracias a las campañas de información se espera de que aquí
a 2018 el 30% de la población mundial esté al tanto del problema de la
desertificación y degradación de los suelos, y que con las acciones el proceso
pueda revertirse.