En Mallorquín buscan convertir en atractivo turístico campanas gigantes traídas de Europa

El sacerdote Alfredo Auron, cura párroco de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, pidió la inversión de 250 millones de guaraníes para cambiar totalmente el techo del templo y la colocación de un sistema de iluminación para la torre que alberga a tres campanas más grandes del Paraguay. La intensión es convertirla en un atractivo turístico mas para la región.

"Sin dudas es algo admirado y respetado por la gente. La idea es que la gente de otros puntos del país y del exterior conozca lo que nosotros tenemos aquí en Juan León Mallorquín", comentó el sacerdote quién aprovechó la visita del jefe de Estado, Federico Franco el pasado 2 de Abril,  para pedir la inversión.

Franco, que participó de una serie de actos por el aniversario de la ciudad, derivó el pedido al ingeniero Franklin Boccia, director Paraguayo de la Itaipú Binacional, quien adelantó que está dentro de la entidad trabajar con responsabilidad social, mirando el desarrollo del turismo y dentro de ese contexto comprometió su apoyo para elaborar un proyecto. "Esto se convertirá en un punto turístico para esta ciudad y entra dentro de los aportes que la Itaipú puede hacer. En principio, la idea del padre es que bien iluminado puede servir para atraer a la gente y que venga a escuchar las campanas", refirió.

LAS CAMPANAS.

Las tres campanas gigantes, que juntas pesan 6 toneladas, son consideradas uno de los atractivos que posee la comunidad.  Por su tamaño y peso son dignas de conocer y destacar su valor patrimonial tan valorado y apreciado por los pobladores de Mallorquin.

Las tres campanas llegaron de la Diócesis de Nassau, Baviera – Alemania entre 1.972/73 gracias a la aceptación del ofrecimiento hecho a las misiones del Verbo Divino.

Por el peso total de las tres campanas, seis mil kilos, se erigió una torre especial para que la pueda soportar, este trabajo estuvo a cargo del Hemanos Mainrado Magg y Alfred Stumpfel, con la colaboración de los parroquianos, construyendo un armado de tirantes de 10 por 10 pulgadas concatenadas con bulones y revestidos de material cocido alcanzando una altura desde el piso hasta la cruz final, 28m de altura.

Las campanas de acero de nuestro templo llevan grabadas la data de su fabricación: 1.948, y los nombres de los Santos a quienes fueron consagradas. La más grande pesa 3.200 kilos, mide 1,70m., de diámetro fue consagrada a San Sebastián, la mediana a San Juan Bautista y la más pequeña fue consagrada a María Inmaculada, todas juntas pesan 6.000 kilos.

Auron aprovecho la visita de Federico Franco para pedir recursos para cambiar el techo del templo e iluminar la torre.