Solo 4 de las 35 viviendas fueron destruidas ayer jueves
durante un procedimiento judicial en la colonia Santa Teresa, distrito de
Mariscal López, departamento de Caaguazú. El
operativo debe continuar el próximo martes. Se trata de vieja lucha por la
posesión de las fincas 240 y 80, de 2.000 hectáreas.
El procedimiento judicial se levantó pasado el medio día,
debido a que la orden judicial no especificada la ubicación de las viviendas.
Supuestamente fueron identificadas 35 casas, pero la comitiva no las encontró y
el operativo deberá continuar el próximo martes confirmó el comisario Tolentino
Espinosa, jefe de Policía del departamento de Caaguazú.
Los afectados aseguran que son antiguos ocupantes y calificaron
de ilegal la acción debido a que la disposición judicial solo afecta a
ocupantes que se instalaron en el lugar después del 10 junio del 2010, fecha en que se
ordeno no innovar en el lugar, dentro de
un juicio de desalojo planteado por la Coordinadora San Roque, contra Miguel
Ramírez y otros.
Una fuerte dotación policial fue destinada para el
cumplimiento de la orden judicial. Se movilizó
250 hombres, tres ómnibus, 5 patrulleras y un helicóptero, que acompaño
el procedimiento desde el aire. Como
refuerzo, una dotación de agentes llegaron del departamento de Alto Paraná.
Maquinarias, perteneciente a los accionantes se
encargaron de echar las viviendas, prenderlas fuego y luego arar la tierra,
mientras los ocupantes de los ranchos miraban impotentes convertirse en cenizas
sus pertenencias, incluyendo sus cultivos.
LA ORDEN.
El procedimiento se realizó en las fincas número 240 y
38, en cumplimiento al Auto
Interlocutorio (A.I) 957, que ordena que
la fincas deben quedar libres de las ocupaciones precarias instaladas posterior
a la orden judicial de no innovar decretado por A.I. número 253 de fecha 10 de
junio del 2010 y su ampliatoria mediante el A.I, 456 de fecha 19 de agosto del
2011, dictado en los autos caratulados “Coordinadora San Roque contra Miguel
Ángel Ramírez Ramos y otros sobre desalojo”, expediente número 122 del año
2010.
La medida judicial fue dispuesta por el magistrado Daniel
Colmán, juez en lo Civil y Comercial del Quinto Turno de la VI, Circunscripción
Judicial del Alto Paraná. Todo el
procedimiento estuvo encabezado por la oficial de Justicia Editht Ojeda Zarate
y el comisario Tolentino Espinola, jefe de Policía del Caaguazú.
Mario Vega abogado de la Coordinadora San Roque que
aglutina a pequeños y medianos
productores, afirman que cuentan con el
titulo de las tierras y que por ello iniciaron el juicio de desalojo.
Explicó que, si bien son dueños de unas 2 mil
hectáreas, el conflicto concentra en un
área de 350 hectáreas.
“Esta gente en principio se ubicaba bajo precarias carpas
en la cabecera de la finca en la calle, allí estuvieron más de un año y al
promover la demanda, solicite la prohibición de innovar. Ellos fueron
notificados y la disposición quedo firme. Ellos solicitaron el levantamiento y
luego el año pasado empezaron a construir estas viviendas”, aseguró.
Insistió que todas las viviendas que serán destruidas
fueron levantadas posterior la orden de no innovar.
Por su parte el abogado Buenaventura Ramos, que
representa a los afectados distribuidos 5 comunidades; Compañía Reserva
Paraguay, Caacupemi, San Carlos, San Marcos y San Lorenzo, asegura que la
acción fue ilegal porque afectó a personas con ocupaciones antiguas. Rechaza que las viviendas destruidas fueron
levantadas después del 2010, año en que se ordeno no innovar sobre estas tierras.
“Acá no hay ninguna construcción posterior a ese año.
Todos son ocupantes antiguos de 10, 15 y 23 años. No tenemos ningún problema con la orden
judicial. Si existe alguien que ingresó después de junio del 2010, no hay
ningún problema, pero les aseguró que
todas estas viviendas destruidas son antiguas, incluso uno tiene título.
Mañana voy a insistir para levantar esta orden judicial”, insistió.
Mencionó que se
trata de un litigio que se arrastra hace varios años. Sostuvo que tienen un
juicio por nulidad de titulo, en contra de la coordinara San Roque, que está en
pleno proceso y otra de desalojo, de donde proviene la orden de no
innovar. “O sea el juicio está en
trámite y ellos ya hacen el desalojo. Cosa totalmente absurda. Esta coordinadora está compuesto por
brasileños y algunos paraguayos, que se prestan por migaja y traiciona a su
pueblo y a toda su familia”.
DONACIÓN.
Las tierras originalmente pertenecieron al griego
Euthymios Ioanidis, que donó 2.500 hectáreas a favor de los ocupantes, a cambio
de que se dejará sin efecto una expropiación de 5 mil hectáreas de tierras que
data el año 1995.